Aunque en la geografía colombiana no se presentan niveles de fríos extremos, en especiales condiciones se debe prestar atención cuando las temperaturas empiezan a bajar, revisando la adaptación de nuestro perro o gato a esta temperatura. Este blog «Frio en perros» nos dará algunas pautas para tener presente.
Pese a que los perros y gatos están cubiertos por una capa de pelo y de grasa en la piel, a veces no es suficiente para protegerse de los climas por debajo de las temperaturas promedio.
¿Cómo identifico una situación de atención?
Las condiciones de nuestro amigo de 4 patas definirá si están expuestos a o no al frío, entre ellos, pelaje y edad, pero en términos generales se debe identificar:
- Temblores: Cuando se observan temblores, es porque está pasando frío. No se debe confundir siempre con nervios o ansiedad (con excepción de algunas razas y en perros definitivamente nerviosos). Al observar esto se puede cubrir el animal con un ropaje apropiado.
- Nariz o Piel seca
- Cansancio o movilidad lenta: Cuando hace frío, nuestros amigos duermen más de lo habitual, pero observarse si sus músculos se le ponen rígidos, y su respiración se pone lenta. En este caso lo que hay que hacer es cubrirlos bien y masajearlos para que entren en calor.
¿Será que mi mascota es susceptible al frío?
Desde luego, no todos nuestros amigos están igualmente adaptados para el frío. Por ejemplo, los perros pastores como el Pastor Collie o San Bernardo cuentan con una doble pelaje que impide que su temperatura corporal baje, sin embargo en Colombia el frío extremo no es común, por lo que nuestras mascotas pueden haber perdido su protección natural; los que tienen el pelo corto sólo cuentan con única capa de pelo. También están expuestos al frío las mascotas en edades inferiores a las 10 meses. Considera estas observaciones al vestir a tu amigo de 4 patas, el Frio en perros es muy poco frecuente.